El Taj Mahal es el monumento al amor. Deslumbra al visitante con su blancura y su perfección. Es una lágrima en la mejilla del tiempo, en palabras del poeta indio Rabindranath Tagore. Patrimonio cultural de la Unesco y una de las siete Nuevas Maravillas del Mundo, el Taj Mahal es asimismo un ejemplo de la capacidad del ser humano para amar y crear belleza.
La historia y la leyenda se mezclan en el Taj Majal, un conjunto de edificaciones realizadas en mármol, con inscripciones e incrustaciones de piedras semipreciosas, y rodeadas de hermosos jardines y estanques.
Este monumento al amor se encuentra en la milenaria ciudad de Agra, a orillas del río Yamuna, y a poco más de 200 kilómetros al sur de Delhi, la capital de la India.
El Taj Mahal nació de una historia de amor, protagonizada por el emperador mogol Sha Jahan y su tercera esposa, Arjumand Bano Begum, más conocida como Mumtaz Mahal, o Luz del Palacio. Ambos se enamoraron cuando tenían catorce años y se casaron en 1612, cinco años más tarde. Mumtaz Mahal fue siempre la esposa favorita del emperador, su confidente y su consejera, y le acompañaba incluso en las campañas militares.
Se dice que fue en una de estas campañas cuando se produjo la muerte de la Luz del Palacio debido a complicaciones durante el nacimiento de su decimocuarto hijo.
Sha Jahan llegó justo a tiempo desde su tienda para ver agonizar a su esposa, quien le hizo prometer que levantaría el más hermoso de los monumentos en recuerdo de su gran amor.
Sha Jahan ordenó dos años de luto por la muerte de Mumtaz Mahal y comenzó en 1631 la construcción en mármol blanco del monumento funerario, a orillas del Yamuna.
El emperador deseaba construir para sí mismo un mausoleo en mármol negro en la otra orilla del río, que fuera réplica del Taj Mahal y al que estaría unido por un puente de plata.
Sha Jahan dedicó gran parte de los años siguientes a la muerte de Mumtaz Mahal a supervisar la construcción del mausoleo, que debía recordar con su esplendor, su belleza, sus fuentes, y sus jardines, el paraíso descrito en el Corán.
La obra duró 22 años y cuando estuvo concluida, el emperador cayó enfermo. Varios de sus hijos aprovecharon la debilidad de su padre para dividirse el imperio y Sha Jahan se vio confinado a la fortaleza de la ciudad, situada muy cerca del Taj Mahal.
Desde su prisión, Sha Jahan contemplaba cada día la tumba de su esposa, hasta que murió en 1666. Uno de los hijos del emperador ordenó la construcción en el Taj Mahal de un pequeño mausoleo para que el emperador pudiera descansar cerca de Mumtaz Mahal. Las tumbas de ambos se encuentran ahora juntas, en una cámara subterránea vedada a los turistas.
Se dice que más de 20,000 obreros trabajaron en la construcción del Taj Mahal y que más de mil elefantes transportaron hasta Agra mármoles, piedras semipreciosas y preciados materiales de lugares tan distantes como Egipto, China o Afganistán.
Los mejores artesanos decoraron con versículos del Corán, flores, hojas y vides los mármoles de los edificios, entre los que se cuentan una mezquita, dedicada al culto, y una réplica idéntica construida al otro lado para mantener la simetría.
Estos dos edificios forman parte del gran conjunto de cinco que forman este complejo arquitectónico. Las otras tres son la impresionante puerta de entrada, los jardines, con sus estaques que reflejan los edificios, y el mausoleo, con su bellísima cúpula de 35 metros de altura.
El mausoleo levantado para Sha Jahan es el único edificio que no guarda la simetría del Taj Mahal, que cuenta con un total de 22 cúpulas, una por cada año que duró su construcción.
El Taj Mahal no es inmune a los efectos del paso del tiempo, y para recuperar toda su hermosura y esplendor, las autoridades indias lo están sometiendo a un tratamiento de belleza que durará varios meses y que se había realizado con anterioridad hace seis años.
El tratamiento consiste en cubrir los muros externos con una espesa capa de barro para eliminar la contaminación y el polvo, que restan brillo y color al mármol blanco, y lavarlos después con agua destilada.
El interior de los edificios será objeto también de varias reparaciones y de una cuidadosa limpieza, a cargo de un equipo formado por más de 150 personas.